Me encuentro dentro de la música, en su misma producción, desde el centro y con el sentimiento que la caracteriza. Son horas de roles variantes y sonidos encontrados, buscados, ritmos, caras, creación. Y los pibes la sienten, se juntan para eso, es lo que los une y lo que los mantiene. Se charlan detalles, "¿en qué está?"; "¡ése en el corte!" Y cuestiones como "¿te conviene más los sabados?"
Todos encontramos en cada momento una suspensión de la dinámica, todos logramos destruir el mundo y sus expresiones. Ya todos nos situamos por fuera del juego y creamos los satisfactores a nuestras necesidades, sin que quepa una duda, y sin demasiadas vueltas.
Cuando llega el final para un personaje, se lo acompaña, se lo mira, se le agradece y procura un nuevo encuentro de explosión como el vivido hasta hace un rato. Se fijan los parámetros y se procede a la reflexión y conclusión afectiva: "Suerte, loco, cuidate mucho..."
Y está siempre el comentario: "¡Qué locura, por Dios!" Y se retorna a los rumbos que marca el corazón: una birra, una silla, un pucho, un faso, un comentario, la nada...
No dejen de experimentar la música, che. Poco hay como ella en este mundo amputado y encarcelado por la inmediatez.
Decidimos viajar, porque la vida se consume en un instante, aunque recurrimos a ella siempre de forma indefectible, la amamos, porque esto es vida, y nos encanta consumirla...
+ Tristes Resabios +
Apreciaciones con casi nula presencia de cordura y relevancia
sábado, 29 de octubre de 2011
domingo, 20 de marzo de 2011
¿Equilibrio?
Para un equilibrio forzado, quien pugna por desequilibrarse termina por desconocer la superficie del planeta y por lo tanto, desorientado. Estamos sin rumbo, esquivando obstáculos sin mirar más que para adelante. ¿Lo peor? No tenemos meta.
sábado, 27 de noviembre de 2010
Dama de luz
Se ha producido un error en el mundo.
Un claro y hermoso error, de esos que no abundan ni en cantidad ni en intensidad.
Y se trata increíblemente de la presencia persistente de una luz. Los más perspicaces podrán argumentar que en relación a la latitud pueden encontrarse sitios con una prolongada exposición solar con respecto a otros. Sabré devolverles la especificación siguiente: no se trata de un cuerpo extraterrestre quien en el mundo está produciendo el error, ese magnífico y desconcertante suceso atemporal.
Es un ser completamente cercano (aún más que la nombrada estrella) quien se empeña en acompañar mientras alumbra, quien provee ese tibio resplandor.
Parece, y esto lo susurro, que no todos pueden sentirlo, shhh... Me amparo en las consecuencias, ya que el alcance del brillo se reduce a una circunferencia que me rodea únicamente a mí.
Y eso no es todo.
Si yo me muevo, no me libra a mi suerte, sostiene su coherencia y me acompaña, me resguarda.
¿¡Cómo explicar mi sensación de alegría!? ¡Qué posibilidad me ha beneficiado! ¿¡Qué he hecho para merecer este invaluable presente!?
Y cuando terminaba de expresar mi contento por saberme el destinatario de un regalo como el que es objeto de este relato (ese indudable error en el mundo, esa revolución para con la cotidianidad normal), levantaba también la vista, buscándola con ímpetu. Porque, no lo dije, pero se trata de una dama quien proyecta sobre mí ese manto.
Si fui a quien regaló su luz, quería conocerla.
Y sí... Ahí estaba. No había chance de que no fuera ella. Tenía que serlo...
Me acerqué, me sonrió, me escuchó, me aconsejó, la escuché, le sonreí, se acercó, me acerqué, se acercó...
· · ·
Gracias bonita por dejarme estar junto a vos, y disculpá si abundé en puñales, sabé entender mi felicidad...
Te amo Juli Bilbao.
1/8/10 - Presente - Futuro...
Nacho Nz.
martes, 7 de septiembre de 2010
Alguien dejó esas huellas
¿En qué usas los días?
Hoy puede ser un día menos o un día más, dependiendo de cuánto lo has aprovechado y
para qué.
¿Qué queremos lograr viviendo?
¿Cuánto del día nos satisface?
¿Qué futuro pretendemos?
La vida como metáfora, jajajaja, si el tiempo igual pasa...
Miremos o no miremos, lloremos o no, pensemos, compremos, juguemos, durmamos, soñemos, o no... El tiempo igual transcurre.
Se puede decir entonces que dentro del regalo (para algunos, la condena para otros, pero para todos, la chance) que es la vida, la capacidad es limitada, lo realizable es limitado, ya que una cuenta regresiva nos acerca siempre más a la muerte. A cada instante...
Poco tiempo queda, pero suficiente como para una reflexión, un llanto, un grito, un movimiento y un poco de placer.
Llevá siempre en un bolsillo a tu cabeza,
porque aunque pugne por escabullirse,
te tiene que acompañar, no hay otra che...
El futuro no es sino el pasado, visto desde arriba. Y si el pasado, pisado... ¿Qué nos queda?
Nacho Nz.
jueves, 5 de agosto de 2010
Esto hacemos
No queda nada
Ana no duerme, si no estás...
¿Quién le va a contar las estrellas, hasta terminar?
¡Qué miedo da el silencio! Un ruido tan familiar...
Y una copa invité a brindar, por las cenizas.
Llegarás a la puerta que quedó medio abierta,
a doblar la apuesta...
Se da cuenta que hace frío afuera,
y no queda nada,
no queda nada.
(Rodrigo Raggi)
martes, 3 de agosto de 2010
Se necesita un poco de distracción.
Gracias a los que me han ayudado a comprender algo que parece tan simple que quizá antes, no había cuestionado: Lechu, la Colo, Hugo, Jules, Nico, Fran, Fia, la Nena (jajaja), Pau, Ori, el Pollo, Rudy, Maga y yo.
Es necesario, para mantenerse vivo, algo de distracción. Tengo la manía de desacreditar todo tipo de entretenimiento mientras más estúpido y menos interesante. Y si bien creo que son una mierda si se transforman en el eje de lo cotidiano, estoy empezando a ablandarme un poco y admito que son necesarios.
A los dos o tres que lean esto les pregunto, ¿no les pasó en alguna etapa de sus vidas que se dedicaron a plantearse todo y a cuestionarse cada paso, cada comentario, cada color, etc.? Yo sí, es más, no tengo recuerdos de no haber estado cuestionando cada cosa del día. En otro escrito incluso he recomendado la duda como intento de ruptura de la monótona realidad de mierda que nos oprime, pero me he dado cuenta que para no caer en la locura (literalmente), debemos tener un momento que nos lleve a otro nivel, más superficial, pseudoconcreto.
Y sí, la verdad, he logrado tener cuestionamientos tanto más críticos cuanto ha estado acompañado el día de una charla que en realidad no dice nada, cuanto se ha hecho presente la risa, y bueno, algo más también.
¿Será que la alegría no sólo no es opuesta al pensamiento orientado hacia acción transformadora sino que es subsidiaria de él? No nos conformemos con el entretenimiento, no debe ser una excusa, debe ser funcional a nuestra causa mayor, y obviamente más seria.
Estoy empezando a reir, y es porque reiré que lograré darme cuenta cuando llore o grite de terror.
Nacho Nz.
Es necesario, para mantenerse vivo, algo de distracción. Tengo la manía de desacreditar todo tipo de entretenimiento mientras más estúpido y menos interesante. Y si bien creo que son una mierda si se transforman en el eje de lo cotidiano, estoy empezando a ablandarme un poco y admito que son necesarios.
A los dos o tres que lean esto les pregunto, ¿no les pasó en alguna etapa de sus vidas que se dedicaron a plantearse todo y a cuestionarse cada paso, cada comentario, cada color, etc.? Yo sí, es más, no tengo recuerdos de no haber estado cuestionando cada cosa del día. En otro escrito incluso he recomendado la duda como intento de ruptura de la monótona realidad de mierda que nos oprime, pero me he dado cuenta que para no caer en la locura (literalmente), debemos tener un momento que nos lleve a otro nivel, más superficial, pseudoconcreto.
Y sí, la verdad, he logrado tener cuestionamientos tanto más críticos cuanto ha estado acompañado el día de una charla que en realidad no dice nada, cuanto se ha hecho presente la risa, y bueno, algo más también.
¿Será que la alegría no sólo no es opuesta al pensamiento orientado hacia acción transformadora sino que es subsidiaria de él? No nos conformemos con el entretenimiento, no debe ser una excusa, debe ser funcional a nuestra causa mayor, y obviamente más seria.
Estoy empezando a reir, y es porque reiré que lograré darme cuenta cuando llore o grite de terror.
Nacho Nz.
sábado, 17 de julio de 2010
A mi hermana Juli
Tranquila, a la noche, sola con la almohada, hay que ver si la lucha les es favorable. La angustia no se tapa, se encara. Puede ocultarse, desprestigiarse, pero lo que el día cosechó de alagos y autoestima, el vacío del insomnio se encarga de ponerlo a prueba. La falsedad y la carisma suelen emparentarse, pero los verdaderos carismáticos se ganaron la ronrisa, como vos. No vale la seguridad, es una droga más, lo que vale es el valor para valerse de la astucia para desafiar la infelicidad.
Te amo.
Nacho Nz.
Te amo.
Nacho Nz.
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